En estas últimas semanas hemos utilizado nuestros ratos de cuento para hablar de la importancia de decir palabras bonitas y dulces a las personas que queremos, y es que hemos descubierto que esas palabras provocan directamente...una sonrisa ( o más ) en la cara de los que las reciben.
El libro "Adivina cuanto te quiero", cuenta la historia de la gran liebre color avellana y la pequeña liebre que se dicen una frase preciosa "Yo te quiero hasta...". Una historia muy bonita que les ha encantado y que nos ha dado pie a inventarnos nuestras propias frases, como..."Yo te quiero hasta Pinsoro"o "Yo te quiero hasta el parque". Pasamos un buen rato y recordamos este cuento a menudo.
Me han dicho que en casa también han jugado con los papas y mamás a decir estas frases. Seguro que han conseguido más de una sonrisa.
En clase todo acabó con muchos besos y abrazos a los amigos, y es que aunque nos conocemos hace poco...¡ya nos queremos un montón!
Y hoy hemos empezado a contar el cuento "Las palabras dulces", que cuenta la historia de una pequeña ardilla que tiene los mofletes llenos de palabras dulces, y no encuentra el momento de soltarlas. Parece que todo el mundo a su alrededor está demasiado ocupado pero...¡Lola se sentirá genial cuando suelte esas palabras!
Y claro, después de esto, como imaginareis nuestros mofletes también se han hinchado de palabras dulces y por supuesto...¡las hemos soltado!!
La verdad es que este tipo de cuentos nos ayuda a hablar de la importancia de expresar sentimientos y de solucionar los conflictos con las palabras.
Os dejo un enlace para poder conocer estos cuentos con más detenimiento en video o presentación y disfrutarlos con ell@s en casa ( Clicar aqui para verlo ).
Recordad que el futuro placer por leer y por las letras se consigue fundamentalmente con los cuentos...¡espero que disfrutéis de ellos!